Mensaje recibido el día: 18-02-2014
Ayuda.
Que palabra definida en unos pasos poco andados a través de un cristal, si caminas rápido se puede romper, si caminas despacio, todo es transparente, frágil es ¿Por qué no pedir ayuda? ¿Y cómo? Es fácil, muy fácil, cuando empleáis la voluntad de corazón, pero difícil, muy difícil, cuando el orgullo impera por delante de su orden.
La ayuda está ahí, siempre esperando, trabajando, siempre para cada uno, solo pensar que hay que saber pedir y después esperar, esa es una gran tarea, porque no olvidar que todo llegara en su momento justo, nunca antes.
Muchas veces esa ayuda no es la que esperábamos, ni la que realmente queríamos o deseábamos, pero si es la que en realidad es necesaria para el proceso del espíritu, es ahí donde se debe de aceptar las pruebas y obstáculos que van viniendo a lo largo de la vida.
En cada momento la recibimos, y la dais sin apenas daros cuenta en ningún momento.
Tantas veces la ayuda viene por lugares o momentos inesperados, pero tantas otras a través de sentimientos adquiridos por personas nobles que van transmitiendo su bondad y ayuda a otras muchas, esta es la ayuda terrenal que como cadenas entre lazadas transmitís unos a otros, reformando una ayuda muy necesaria entre toda la humanidad, es una esencia pura de mucha paz y luz que lleváis enriqueciéndoos unos a otros tantas veces, sin apenas percibirla otras tantas.
Debéis estar alerta a esa ayuda, la cual tantas veces recibiréis y daréis sin apenas daros cuenta.
Hay una labor grande a realizar y es el progreso de todos, esa labor es la fuente del comienzo, en donde todos apagan esa set de ahogo que todos poseéis en algunos momentos, son como piezas de un puzle bien organizado, y unidos entre si van enlazándose unos a otros para formar ese cuadro que es la propia vida de todo ser humano.
Esa es la verdadera razón de ser, y de ayudaros unos a otros con respeto y verdadera bondad y humildad. Esta es la ayuda que hoy quiero que comprendáis, esa que por razón de progreso debe de existir en todo el planeta, la que vosotros mismos podéis dar y crear, la que os ayudara a ser mejores, y la que os guiara para poder vencer las barreras del egoísmo.
Existen personas de una belleza incalculable y otras de mucha maldad. Guiaros por el bien para seguir construyendo a cada paso gotas de luz que vaya iluminando la esperanza de otros hermanos. Porque a pesar de las grandes dificultades solo a través del conocimiento de este bien que es la luz en fuerza y bondad podremos ir renovando el mal que existe, transformando la oscuridad en el bien.
Ser constantes y confiar, porque a cada uno le ha de llegar la ayuda encomendada, pero recordar que solo a través del bien, se recibe el bien.
Entrelazar la luz hacia todos, para que todos a través de la luz vayan iluminando este mundo, en donde ya solo pueda reinar el bien en amor.