Caminando con luz.
Todo empezó un día, poco a poco descubrí un foco de alegría a mi alrededor, asombrosamente.
Aunque todo era tenue u oscuro, para los demás, yo estaba de maravilla lleno de alegría, si energía vital o energía de amor. Ya que realmente era feliz, en mi interior, aunque mi exterior sufriera por los demás, no dejaba de sentirme bien.
Me causó un poco de desajuste en mi interior, como yo podía estar rebosante de felicidad, si todos los demás estaban destrozados o mal parados, por su tristeza de desanimo.
Todo era muy simple según como estemos en nuestro interior esto está reflejado en el exterior, de esa forma comprendí lo importante que es estar alegre, contento, lleno de felicidad.
Para poder transmitir y poder ayudar, era el camino correcto, tener el magnetismo bien cargado para poder aliviar, socorrer, o simplemente sembrar semillas de luz a mí alrededor.
Poco a poco iban acercándose a mi vida más gente un poco inquieta o simplemente faltos de comprensión espiritual. ¿Por qué todos están envueltos en el absurdo e inquietante “ego”? y no transformar el ego, en “ego” superior, querer mas a los demás, dar y respetar a todos. Es el ego superior
Comprendí que el camino era largo y complicado de realizar debería tener muchas vidas para hacerlo real, tal vez sea una escusa, para poner fin a ponerse a trabajar.
Mas me dan la solución ¿cuanta vidas ya hemos vivido? Como no solucionamos ni lo mas mínimo de la vida, la conexión entre hermanos, él porque nos cuesta perdonar, o simplemente porque esta todo mal a nuestro alrededor. “claro está, todos están mal”, como no, yo soy el que tiene la razón, de la razón, sin duda seria este un invento, hecho expresamente para mí.
La verdad seria otra, que no tiene vuelta atrás, ¿con quién estoy? Y porque, gran pregunta: para reflexionar tranquilamente con sensación de no concluido o finalizado bien otras tareas anteriores. Sí de vidas pasadas, deberes atrasados una y otra vez. ¿No somos la inteligencia, o el ser inteligente de este planeta?, algo falla, somos muy animales, o estamos con los ojos cerrados, o simplemente no queremos ver a nuestro alrededor, trabajar en el campo cercano que es el que tenemos que comer con él.
Comprendí lo importante que es el amor de la familia, su unión, y no me refiero a estar siempre cerca el uno del otro sin poder respirar si no el acercamiento real y el libre albedrio del otro, dejarlo aprender, ayudarlo a caminar solo, pero acompañado con el amor natural.
¿Qué se fallaba?, es simple el “ego” venenoso, no le dejaba ver la realidad, sí, tenemos que tener ego, ya que es la unión con el planeta pero lo podemos cambiar por el ego superior, el ego del amor, la sabiduría, el entendimiento, la razón del ser, y lo que cubre todo, a todos la divinidad del Ser superior. Empecemos a trabajar.