Mensaje recibido el día: 10-04-2014
El estado de conciencia.
Los seres humanos caminan unos y otros en diferentes estados de conciencia o evolución, lo mismo ocurre con los espíritus aquí en el otro plano. Son diferentes estados de conciencia, con diferente evolución y moral.
Cada cual lleva una etapa de trabajo y evolución, y cada uno posee diferente grados de comprensión, puesto que estando en un mismo lugar, hecho o momento, existe diferencia de grado para ver o percibir las cosas.
Si cada uno tratase de poner una gran labor de interés en procurar evolucionar, el estado de conciencia lograría poner en acción diferentes estados o grados de evolución en su adelanto.
La conciencia es un estado del que cada una posee y trabajó, esto le permite una forma o graduación de progreso interior de su conciencia, permite discernir algunas formas o estados improductivos de los cuales dejo adormecido en varios momentos de sus existencias, esto no es algo que te defina mejor o peor, solo es un estado de progreso o adelanto.
Mejor o peor es tu forma de actuar o ver las cosas, eso define tu conciencia más trabajada hacia el bien, eso es tu moralidad.
Hay diferentes estados, algunos definen el carácter de cada persona, otros son formas de diferente progreso.
Solo existe un camino recto y sabio a pesar de los diferentes caminos escogidos por cada uno, de ahí el libre albedrio de cada uno, pero como ya os han dicho tantas veces solo hay un camino del que salimos y regresaremos.
La conciencia del hombre o espíritu es la consecuencia de nuestros verdaderos actos, puesto que en ella llevamos el archivo de nuestro trabajo anterior.
Conforme progresamos vamos alejando en ella el bien y el mal, es la que nos recuerda como verdaderamente debemos de actuar, por eso según nuestra evolución y trabajo anterior podemos descubrir o discernir como hemos de hacer las cosas en cada momento, ella nos permitirá poder llevar a cabo las tareas bien hechas.
Muchas veces se repite cuando se hace un acto improductivo o una acción mal hecha, tantas veces habéis escuchado ¡es que no tiene conciencia! esa es la respuesta al grado de trabajo hecho anteriormente, y archivado dentro de la conciencia.
Por eso permitir conocerla y trabajaros para que podáis crecer, para hacer el bien llevando una conciencia limpia, evitando cada día las malas acciones y construyendo siempre el bien, podrá construirse una gran conciencia, puesto que dentro de ella existe una semilla limpia y pura que puso Dios a cada uno de todos sus hijos.
Cuanto más pura y limpia mas se evoluciona hacia el bien y la ayuda ha los demás, no lo olvidéis nunca, la gran esencia de trabajaros y trabajar.
Luchar y amar siempre por el bien y para el bien, construyendo cada día una conciencia más pura.