La fuente de la salud

La fuente de la salud.

Muchas veces os preguntáis, el porqué de las enfermedades sin hallar respuestas patológicas, solo las que siempre a través de la ciencia os han contestado, incluso muchas veces ni siquiera ha habido una respuesta.

En el plano del espíritu todo es muy diferente, ya habéis estudiado muchas respuestas y aclaraciones a través del espiritismo. Son respuestas mucho más simples de lo que a veces determináis en vuestra mente.

El espíritu en su creación es completamente limpio y puro, solo a través de sus actos, va formando esas carencias de buena esencia, transformando en partículas, podríamos decir impuras, todo eso deteriora al peri espíritu transformando de ahí muchas enfermedades.

Muchos fracasos en la vida son consecuencia y aclaraciones de otras vidas, de otras circunstancias poco reconocidas para vosotros los espíritus encarnados. La verdadera fuente de salud es aquella donde el bien reina sobre el bien, donde el espíritu haya la paz interior, donde se realiza la armonía.

Todos sabéis cuando una nota armónica, unida a otras, forma esa conjunción de la cual todo esta armonizado en un todo. Todo te envuelve y te eleva, formándose un complemento armonizado.

Imaginar todo eso en vuestra mente, formando una esencia tan pura de la cual ya no existe ni odio, rencor o egoísmo un etc. De reglas inútiles que no sirven para nada, solo para desarmonizar todo peri espíritu y espíritu, creando esas faltas en donde se rompe la armonía, de ahí, de esa desarmonía comienza todas las enfermedades, rompiendo la cadena del bien.

Cuando el espíritu lo ignora sufre las consecuencias, de ahí el conocimiento de las cosas para poder crecer y actuar.

Hermanos que con paciencia arrastráis enfermedades, vivirlas con amor y confianza en esas expiaciones que os llevaran a lograr esos frutos hacia el bien. Cambiar hábitos no es fácil pero nunca imposible y debéis comenzar la gran tarea con confianza en Dios.

Lograr la escala de valores en el bien es una grande cosecha para todo espíritu que solo anhela esa paz y armonía. Cuando la sintáis y descubráis solo ya deseareis estar envueltos en ella.

Luchar y amar solo por el bien  desterrando el mal en vuestras vidas, crear buenas vibraciones alrededor de todo y si la dificultad llama a vuestra puerta llevarla con amor y paciencia pues nada se pierde en la viña del Señor.

Que la luz que envuelve vuestros corazones os llene de esa paz y armonía necesaria para la salud del alma.

Con todo el amor este espíritu que desea el bien de toda la humanidad.

Paz y amor para todos.