El Viento.
Ocupada estoy todo el resto del día, bajando de un lado hacia otro, momentos perdida, momentos de angustia y momentos de amor…
Ahora me quedo con este último momento, ese momento en el que la sensatez se me pierde y la ignorancia me envuelve. Ese momento en el que la razón me nubla pero quisiera retener, una y otra vez siento la persistencia de buscar el amor, ése amor divino que solo está en la creación.
Es inexplicable, ni razonable, en donde se hable el entendimiento pero se nubla la razón, porque solo el corazón responde y en donde el cuerpo ya no se impone, en donde la muestra del ser se entorna oscura y clara y en donde comprendes que la luz nunca se apaga. El entendimiento consigue ver aquello que en otros momentos ni siquiera hubiese podido comprender, pues esta razón de ser sin ser no tiene sentido, ni busca comprender, es así y así es.
Muchas veces escucho decir que es el amor, que es Dios, que es la fe y según sopla el viento nos agarramos a él, siempre buscando un interés. Pues yo os digo hermanos que cuando lo sientes, conoces y comprendes, es como la suave brisa que acaricia vuestra piel, pero por mucha tormenta que caiga no se deja de querer y aunque a veces no lo sintamos, ni sople, siempre está ahí y nosotros con él.
A veces surge tormenta y resuena fuerte como un vendaval, esto hermanos os hace recordar aquellas palabras de nuestro amado hermano y maestro que tantas veces dejó en su enseñanza y el hombre, poco ni mucho no deja nunca de recordar, pero poco para trabajar, hoy vengo a recordar pues. Solo por Amor será salvado el hombre.
Cuando sintáis miedo o abandono no desesperéis, pues en la calma del viento hace retornar la fe. Esa confianza en Él no debe de permitir perder ni la esperanza ni la confianza.
Temblorosa hermanos quisiera poder mostrar lo bella que es la vida, si me permitís recordar. Pues por muchas dificultades que tuve siempre intenté luchar, recordando las bellas palabras que acabo de recordar y para vosotros hermanos os las dejo de amistad.
Pero limpia y fugaz, para poder recordar en los malos momentos os llene de amor y fidelidad hacia aquello que hoy no podéis recordar, pero hubo un día que para poder bajar os comprometisteis y hoy os hago de recordar. Siempre poner amor y amistad en vuestro pequeño y gran corazón eso os ayudara.
Quedar en paz hermanos y recordar que a pesar de las tormentas de la vida siempre retornamos a la paz y calma del espíritu pues atormentado tantas, tantas veces está.
Con amor y luz hermanos de la caridad.