El navío.
Nuestra vida es como una barca a la que hay que llevar a la orilla del mar para ponerla a navegar, a veces esta parada sin esforzaros a ponerla en marcha, esto hace tener que emplear mucho más esfuerzo e incluso muchas veces necesitáis un gran empujón para comenzar ese pequeño gran viaje.
En la navegación va ocurriendo grandes cosas nuevas, experiencias que os dan y ayudan a aprender. También hay momentos de la navegación en los que todo está en calma y en paz pero llegan nuevos navíos que interrumpen esos momentos, estas son las pruebas a realizar para poder llegar a defender y saber cómo actuar, es el aprendizaje que todos debéis de pasar a lo largo de vuestro viaje.
Que sencillo seria navegar en aguas tranquilas y sin ningún barco que pueda interrumpir esta calma, siempre con un mar tranquilo y sin complicaciones, pero esto hermanos sería un viaje sin aventuras, sin oportunidades de aprender y progresar, sería un viaje sin provecho alguno, una vida inutilizada y con poco o nada de adelanto.
Todos anheláis la calma, el bien estar, pero la luz solo se brinda en las experiencias de lucha, esa lucha de pruebas en el fondo de nuestro, vuestro interior, las tormentas interiores son producidas por nuestros propios errores en el egoísmo y falta de amor. La lucha de cada día es las pruebas a superar y las tormentas saber y aprender a tolerar.
La moral alta logra y consigue vencer muchas de esas pruebas y tentaciones que están ahí en cada momento y cuanto más logréis vencer esas batallas, esas tormentas, lograreis navegar con mucha paz y luz porque no olvidar que está ahí y es el mayor deseo de nuestro Padre.
Esa lucha interior y exterior de nuestras imperfecciones hará y podrá mostrar poco a poco la luz que cada uno posee, siempre hacia los demás y poder ser un gran navío de paz y luz. Esa calma que cada hermano necesita y solo la experiencia de la tormenta bien superada, le hará ver su propio adelanto.
Siempre caminar con esa luz y esperanza, superar las pruebas con mucha confianza y amar con toda la fuerza de vuestro corazón.
Con amor y luz, la luz del camino está en ti.
25 – 5 – 2017