El principio

El principio

 

¿Hubo un principio? Se preguntan muchos sin ver más allá de su importancia. ¿Todo lo tiene? Otra pregunta que verdaderamente ¿conocéis la respuesta?

La base de todo en un conocimiento más allá de toda ignorancia, en la que aún se habita ahí en la tierra.

El saber y la razón son buenas compañeras, pero la distancia del verdadero conocimiento aun muy lejano.

Esa pregunta es principio de conocimiento, pero que aun no se está en razón de poseer.

A lo largo del tiempo el hombre busca respuestas, pero cuando descubre una siguen saliendo otras aun más complicadas y desconocidas para él.

Su sabia razón es poca sabiduría aquí en la tierra, en donde todos estáis en un gran proceso de evolución.

Ay países donde el hombre ya tiene unos valores reconocidos, una moralidad un poco más avanzada por así decirlo. Pero otros lugares toda la razón esta convertida en violencia a causa de odios y resentimientos, de una vida a otra, sin la menor prueba de mejoramiento, guiados aun por instintos muy primitivos.

En la lucha por el bien el hombre adquiere unos valores que le hacen evolucionar, ese progreso  va realizándose preguntas hacia un conocimiento superior. Su llama interior se enciende saliendo hacia la luz toda la parte divina que posee, como un charco de agua sucia en donde depositas agua cristalina y el tiempo la hace translucida.

Todo despertar hacia la luz, hacia el bien, os hace discernir las preguntas que lleváis en vuestro interior, viendo con más lucidez respuestas que antes no las hallabais. Otras son difíciles de percibir, puesto que en la escala de evolución no está permitido aun.

Todo llegara, el conocimiento hace libre a todo espíritu, llenándolo de paz y bien estar. Todo depende de un buen equilibrio, y para eso debéis preparar vuestro espíritu en profunda limpieza, que os ayudará en el proceso de crecimiento.

Amar y perdonar son fases de preparación y enriquecimiento interior.

No dejar a un lado la esperanza, fortaleceros en el bien, luchar por la paz interior y sacrificar vuestros egoísmos, para  ir limpiando con sabiduría interior.

Amar y seréis amados, pero primero respetaros a vosotros mismos, reconociendo vuestro interior para poder crecer. No dejar de aceptar vuestra propia evolución, sin desesperación.

Todo llega, y el tiempo es la sabia respuesta a todo. Limpiar renovando semillas fructíferas que a través del tiempo y espacio llegan.

El principio siempre será la razón en el bien, dentro de todo progreso lleno de amor, conocimiento y sabiduría.

Amar os manda este espíritu que desea y sueña el bien de esta humanidad. Paz y amor para todos por igual.